Mi chica

 

#Isabella 

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#Cerrado

||Mi chica

||Presente

||Isabella - Sofía

                   Había terminado con una de sus víctimas estaba bañada en sangre y desnuda, había matado a una pareja de lesbianas, Sofia no entendia eso, aunque le dijo que las mato no por su preferencia sexual, podía creerle porque sabía que no tenía esa mania por fiijarse en un solo punto, sino que podia matar a alguien sin fijarse en esos detalles.

Cuando se alejo de aquellos fríos cuerpos, Sofía se acercó a ella, no con una toalla para que se limpie sino directamente a besarla apasionadamente, algo que tomo a Isabella por sorpresa, pero no sé detuvo a pensarlo mucho sino que lo hizo con gusto.

—¿Qué pasa querida?—decia entre beso y beso.

—Tu, tu me pasas—dice mientras le abraza por el cuello sin importar si se manchaba su vestido de sangre—verte así, llena de sangre me puso muy caliente, humeda.

Otros días decir eso, le dejaría toda roja de sus mejillas, pero no en ese momento, en ese momento su propia pasion desenfrenada la tenía completamente entregada e Isabella, por lo excitada que estaba, no se detuvo a pensar, solo se dejo llevar. 

Entre beso y beso, Isabella fue penetrando a Sofía con un dedo, luego dos y llegó a hasta tres dedos, pero casi siempre con el tercero era prácticamente doloroso para Sofia, pero le pidió uno más y aunque sorprendio a Isabella, tampoco no le tomo mucha importancia, la follo con sus dedos hasta que la hizo venirse.

—¿Quien anda muy caliente? No es queja, solo no es típico de ti—su cuerpo ahora aperlado por el sudor, hacía que la sangre en su cuerpo no se secara por completo—Deshagamonos de los cuerpos, en casa seguimos. 

—¿Me dejaras esperando más por ti?—la joven princesa le hizo puchero a su asesina favorita.

—Solo un poco más, además aquí no tengo el dildo que me gustaría usar contigo—La idea le fascinó aun más a la princesa—¿Quien diría que una princesa, sería tan caliente y loca?

—¡Oh, cállate! Antes que te haga follarme nuevamente—ambas rieron, una porque lo dijo sin pensar y la otra porque a pesar que le tomo desprevenida, le causó gracia. 

Si había algo que descubrió con Sofía era que podía tener sexo después de matar a alguien, antes era una forma de escape, cuando no podía cometer un homicidio, ahora no es un complemento después de cometerlo. 

Cubrieron muy bien sus huellas, deshaciéndose de los cuerpos con ácido, volviendo a casa dónde podían hacer lo que quisieran, pero sobretodo Sofía seguía caliente y ansiosa por más sexo rudo con Isabella.