I'm Barbie

 

#Isabella

#killerpink

#Iambarbie

                      Hola, un placer conocer a las futuras víctimas, me llamo Isabella Swan —Y por favor eviten la comparación de mi precioso nombre, con aquel de un libro tonto y patético, si es que aprecian tener sus órganos en su sitio—soy hija única y huérfana, mi madre murió cuando yo tenía dieciocho años, mi padre murió a los dieciséis años junto a la zorra de su nueva esposa y el bastardo que esperaban y si me preguntan si sentí algo por la muerte de mi padre, les puedo decir que una profunda satisfacción porque yo misma lo asesine, junto a su bastardo no nato y la putita que tomo como esposa. 

Estudie medicina, pero no termine, viaje y conocí a Serena, una de mis primeras víctimas sino fuera porque a diferencia de otras, ella estaba dispuesta a servirme con tal de no morir. La dejé vivir y me sigue a dónde sea que yo vaya, obedece sin oponerse aunque eso signifique romper sus propias convicciones. Últimamente a falta de poder asesinar, he abusado sexualmente de ella, la he torturado muchas veces y de muchas maneras, además abusar de ella es mi manera de hacerle pagar por quitarme a la atención de Lilith. 

Maldita la hora que me tope con ella, lastima que no puedo matarla, porque no puede morir por más que lo intente. Ella me lo dijo y yo lo corroboré tiempo después, pero juro que si pudiera, la asesinaría por hacerme sentir especial y luego botarme, en respuesta torturo y violo a su juguete, quizás la mate después. 

Cómo datos extra sé un par de artes marciales, Kendo y Capoeira (que es un arte marcial brasileño), sé cinco idiomas y un dialecto (Hawaiano) y además aprendi a cocinar, porque no siempre me como los órganos de mis víctimas crudos. 

Y si se lo preguntan, no, no soy un demonio o vampiro ni un ser sobrenatural, de hecho hasta que no conocí a Lilith, para mí esos seres solo eran mitos e historias fantásticas. En fin, con respecto a algún sobrenombre, no me gustan, así que solo díganme Isabella —O considérense cadáver—